Reviews

Big Baby by Charles Burns

lsparrow's review against another edition

Go to review page

3.0

Not the style of drawing or story I usually like but somehow I got so sucked into this

dantastic's review against another edition

Go to review page

5.0

Big Baby collects the adventures of Tony Delmonto, the Big Baby. It's some crazy shit!

Once upon a time, I watched a documentary about underground comics and Big Baby by Charles Burns was one of the comics featured. Now, decades later, I have it in my clutches.

Charles Burns' art reminds me of 1950s EC stuff, not only the horror stuff but Mad as well. There are grotesque figures, heavy use of blacks, and all sorts of creepy things going on. Tony's mind tends to run wild due to his obsession with horror comics so he jumps to conclusions. Not to say that he isn't encountering aliens, ghosts, subterranean beings, and a weird plague afflicting teenagers...

There's not much else to tell about this. The slim 64 page hardcover is in an oversize format, perfect for showcasing Charles Burns' art, which I am now a tremendous fan of.

Big Baby is a collection of tales that remind me of what it was like to get freaked out over bumps in the night. I need more Charles Burns! Five out of five stars.

daoa's review against another edition

Go to review page

5.0

Oscuro. Inocente. Cruel. Necio. Tierno. Los adjetivos que me remiten a la existencia de este niñato –como le llaman en la versión traducida de Ediciones La Cúpula (2005)-, rayan entre lo infantil a lo macabro. Una dualidad acaso no tan extraña. Tony Delmonto se olvida del mundo real que tan poco conoce y se deja invadir por su vasta imaginación, libre en la soledad de la sala de estar o en su dormitorio, devorando cómics y programas de TV cuya insondable oscuridad es solamente comparable a la sucia y siniestra realidad en derredor.

El pequeño Tony, amo y señor de un reino encarnado en dinosaurios, extraterrestres, robots, cohetes, soldados y demás tipos de monstruos. El pequeño Tony, ávido de misterio, aventura y horror, mas también deseoso de indagar en la vida de los otros, donde refleja todos los elementos y situaciones sobrenaturales que conforman su lóbrego universo.

El pequeño Tony, el Big Baby, es el protagonista de una serie de historias homónimas del cáustico estadounidense Charles Burns (el mismo loco de la aterradora y fantástica Black Hole, con la que lo descubrí muy tarde, sin duda su magnum opus). Publicadas en la década de los ‘80 en la legendaria revista Raw de Art Spiegelman y compiladas en un libro por vez primera en 1999, Big Baby no se distancia de esa influencia por el cine de terror serie B, los cómics de horror, ciencia ficción, los pulp fiction de la primera mitad del siglo XX o la novela negra, elementos que caracterizan a este historietista e ilustrador cuya visión fue descrita por Sammy Harkham -otra figura prominente en el cómic norteamericano moderno, acaso más joven- como “un paralelo inquietante entre los mundos de David Lynch y Lovecraft, con una realidad trastornada, amenazadora, y siempre de una familiaridad suficiente para sentirse casi verdadera”...

Cualquiera puede sentirse identificado leyendo Big Baby. Acaso existan algunos niños que no posean mentes tan recalcitrantes y calenturientas como las de Tony, mas todos hemos tenido –algunos en mayor medida-, ese llamado inmortal por controlar aquellas historias que nos atraen, apropiarnos de ellas y plasmarlas en la aburrida cotidianeidad de nuestra infancia. Aquello tiene como aditivo la tórrida intriga del sexo, cuestión ajena y difusa para todo párvulo, mas no por ello menos atrayente.

Sin embargo, para Tony, todo esto deviene en ‘descubrir sin descubrir’ que su contexto aparentemente normal es el paradigma perfecto de su propia ficción. Su lúdico e infernal interior deja de ser tan creepy en tanto vemos cómo la gente que lo rodea -familias o personas modelo de la clase media norteamericana- son fieles homólogos de todo aquello que engendra su imaginación. Cuando digo ‘descubrir sin descubrir’ hago referencia al intenso hecho de que, si bien Tony es testigo de diversas atrocidades que evidencian la purulenta vorágine en la que se halla sumida la realidad -o al menos, la realidad bajo el perturbado y magistral lente de Burns-, al final del día es un niño inocente, y cree que todos forman parte de la fantasía que él va armando.

Tony Delmonto vive una contradicción: contempla el mundo de manera inocente y pueril, pero ese mismo sendero de exploración es también un descenso moral, al concebir sus actos y lo que presencia como algo esperable. Así, Big Baby nos obsequia retazos de la vida de un niño grande que envilece con cada viñeta, en tanto deslumbra febrilmente con el horror, la impudicia y una naciente sexualidad. Son elementos con los que nos identificamos indefectiblemente, desde lo más profundo de nuestras ficciones infantiles, donde lo grotesco, lo fantástico y lo sensual recorren el mismo camino nebuloso a través de la cotidianeidad, en un grito eterno y desgarrador imposible de escapar, no por impotencia, sino por una razón acaso más confusa y subconsciente, propia de estos años de descubrimiento: porque no queremos.

Link del texto completo:
https://diegolivasarana.com/2018/11/30/el-siniestro-encanto-de-la-infancia-big-baby/

stefanvalenti's review against another edition

Go to review page

5.0

I wanted to pick up Black Hole from the library but they didn’t have it, so I picked this book up instead. I really liked it! Does horror better than most other horror comics I’ve read. The ink work and heavy uses of black is really great, as well as just the overall designs used. Very solid comic, I’m excited to check out Black Hole after this (as well as Charles Burns other comics)

totally_different_head's review

Go to review page

4.0

Reading this and Skin Deep to prep for Black Hole. Genuinely creepy comics with enough humor to not be like a total nightmare.

sinnylong's review

Go to review page

4.0

Story = 3 stars.
Artwork = 5 stars.

levitybooks's review

Go to review page

3.0

Big Baby shows clearly Burns's early potential for gothic line art, psychedelic narration and surreal characters that make his main later works—Black Hole and Last Look—truly great.

It's a fun read, but to me it is not really rereadable, emotionally moving, or shocking enough for me to 'really like' or love' it... but more because this is not a genre I like reading much even in fiction. That written, I can understand why these might be favorites to other people as they are fairly original and aesthetically distinctive—I'd go so far as to say these are underrated. Highly recommended for anyone who liked Black Hole, if only to see his early ideas.

jonh's review

Go to review page

4.0

Creepy kid looks like a giant baby and experiences quiet, Lynchian/Lovecraftian madness in the suburbs.

Freaky, freaky, FREAKY. Definitely worth a read.

edubritto's review

Go to review page

4.0

A primeira história é meio fraquinha, a segunda e a terceira são fenomenais

papersonic's review

Go to review page

4.0

Pretty good! Nice creepiness to it. Easily digestible because it consists of four mini-stories. I think it's pretty neat that it's somewhat autobiographical. I really like the art-style and how things are shaded. Black-and-white comics are cool. I want to check out Black Hole next!
More...