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fearfortheflesh's review against another edition
2.0
Also Bahnwärter Thiel ist super, aber Der Apostel hat mich ja mal so abgefuckt.
cptrexct's review against another edition
challenging
dark
inspiring
reflective
medium-paced
- Plot- or character-driven? Plot
- Strong character development? No
- Loveable characters? No
- Diverse cast of characters? No
- Flaws of characters a main focus? No
3.25
lesemaus007's review against another edition
funny
informative
tense
slow-paced
- Plot- or character-driven? Plot
- Strong character development? N/A
- Loveable characters? It's complicated
- Diverse cast of characters? N/A
- Flaws of characters a main focus? Yes
4.0
schwarzer_elch's review against another edition
3.0
En 1912, un nuevo autor alemán recibía el Premio Nobel de Literatura. Gerhart Hauptmann recibió el galardón “principalmente en apreciación de su producción fructífera, variada y sobresaliente en el campo del arte dramático”, según la Academia Sueca.
El texto que elegí para conocer de cerca a este autor fue la obra de teatro “Los tejedores” (Die Weber), publicada en 1892. La historia se cuenta en cinco actos y está basada en un hecho histórico: la sublevación de los tejedores de Silesia en 1844 ante la irrupción de las máquinas en las fábricas, algo que los condenaba al paro y la miseria. Dato curioso: según las fuentes que consulté antes de leer este título, “Los tejedores” creó el género del drama social en la literatura alemana.
Algo que me pareció bastante interesante es que el texto no cuenta con un protagonista, sino que, a la mejor manera del cine soviético, se “héroe” es una clase social. En este caso, se trata del colectivo de los tejedores que son los que se rebelan ante las injusticias de la burguesía. Este hecho me pareció realmente interesante y, quizás, lo más rescatable del libro.
Otro hecho que llamó mi atención es la crudeza de las situaciones que representa al momento de hablar de la clase obrera (uno de los personajes, por ejemplo, debe matar a su perro para tener qué comer). Del otro lado, están las clases altas, que se caracterizan por su crueldad y su incapacidad de ver la humanidad en los que no son como ellos. De todas formas, me parece necesario dejar en claro que el autor no toma posición por ninguno de los dos bandos (ni obreros ni burgueses), pues en ambos casos se perciben las críticas ante las formas que reaccionan a su realidad y a la de los demás. De hecho, la forma en la que acaba el libro es también bastante interesante, pues representa la opresión de los rebeldes contra aquellos que no quieren rebelarse (o, al menos, que no desean hacerlo según las pautas establecidas por los grupos de poder).
El desarrollo narrativo de la historia es interesante, pues la obra se divide en cinco actos y, en cada uno de ellos, se percibe la evolución del colectivo, pasando de la sumisión a la rebelión. Sin embargo, por momentos perdía la concentración fácilmente, pues sentía que algunos actos eran innecesariamente largos y esto hacía me resultaba tedioso.
Si bien he disfrutado conociendo a este autor y descubriendo esta faceta de la historia que desconocía, no llegué a conectarme del todo con la historia. Por eso, y por lo descrito más arriba, mi nota final es de 3 sobre 5 estrellas.
El texto que elegí para conocer de cerca a este autor fue la obra de teatro “Los tejedores” (Die Weber), publicada en 1892. La historia se cuenta en cinco actos y está basada en un hecho histórico: la sublevación de los tejedores de Silesia en 1844 ante la irrupción de las máquinas en las fábricas, algo que los condenaba al paro y la miseria. Dato curioso: según las fuentes que consulté antes de leer este título, “Los tejedores” creó el género del drama social en la literatura alemana.
Algo que me pareció bastante interesante es que el texto no cuenta con un protagonista, sino que, a la mejor manera del cine soviético, se “héroe” es una clase social. En este caso, se trata del colectivo de los tejedores que son los que se rebelan ante las injusticias de la burguesía. Este hecho me pareció realmente interesante y, quizás, lo más rescatable del libro.
Otro hecho que llamó mi atención es la crudeza de las situaciones que representa al momento de hablar de la clase obrera (uno de los personajes, por ejemplo, debe matar a su perro para tener qué comer). Del otro lado, están las clases altas, que se caracterizan por su crueldad y su incapacidad de ver la humanidad en los que no son como ellos. De todas formas, me parece necesario dejar en claro que el autor no toma posición por ninguno de los dos bandos (ni obreros ni burgueses), pues en ambos casos se perciben las críticas ante las formas que reaccionan a su realidad y a la de los demás. De hecho, la forma en la que acaba el libro es también bastante interesante, pues representa la opresión de los rebeldes contra aquellos que no quieren rebelarse (o, al menos, que no desean hacerlo según las pautas establecidas por los grupos de poder).
El desarrollo narrativo de la historia es interesante, pues la obra se divide en cinco actos y, en cada uno de ellos, se percibe la evolución del colectivo, pasando de la sumisión a la rebelión. Sin embargo, por momentos perdía la concentración fácilmente, pues sentía que algunos actos eran innecesariamente largos y esto hacía me resultaba tedioso.
Si bien he disfrutado conociendo a este autor y descubriendo esta faceta de la historia que desconocía, no llegué a conectarme del todo con la historia. Por eso, y por lo descrito más arriba, mi nota final es de 3 sobre 5 estrellas.
foxteeth's review against another edition
challenging
dark
emotional
medium-paced
4.5
Content Warnings
Graphic: Violence
Minor: Animal death
yanina_daniele's review against another edition
5.0
Una obra de teatro ambienta en 1840 que a pesar de antiguedad el tema planteado sigue siendo vigente, el enriquecimiento de algunos a costa de otros, la explotación, la humillación. Todo esto se representa maravillosamente desde el punto de vista de los tejedores quienes viven en la miseria, trabajando día y noche y ni siquiera tienen dinero para sobrevivir.
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