A review by mariavazquezsolaun
Fortunata y Jacinta - Volumen II by Benito Pérez Galdós

5.0

Desde que ayer di la vuelta a la última página del segundo volumen de Fortunata y Jacinta me invade cierta tristeza. Qué gozada es encontrar una novela que te hace disfrutar tanto y durante tanto tiempo, pero cuanto cuesta tomar la decisión de leerla. Y es que tanto el tiempo disponible como nuestra razón parecen exigirnos buscar el momento adecuado para este tipo de lecturas, saboteándonos.

Fortunata y Jacinta me ha tenido enganchada como lo hacían aquellas series de televisión cuyos capítulos se emitían semanalmente. Me costaba levantar la vista del libro mientras lo leía y a menudo me encontraba repasando algunos pasadizos cuando no lo hacía. Y es que tiene tantos ingredientes esta novela de Galdós para atraparte... Para empezar una construcción de personajes deliciosa. Para todos hay tiempo. Todos son presentados. Todos tienen una historia. No hay buenos ni malos. Evaristo Feijoo, Guillermina, Mauricia la Dura, Maximiliano o Doña Lupe quizá no gozan de tanto protagonismo como Fortunata o Jacinta pero sí del mismo respeto y mimo por parte del autor. ¿Y Madrid? Madrid es otro gran personaje.

El retrato que Galdós hace de Madrid, de sus barrios, de sus calles, de las personas que las habitan y sus costumbres es delicioso. Me ha gustado mucho ser testigo del choque entre esas dos realidades sociales que hoy siguen existiendo. Y del papel de la mujer en cada una de ellas, representado por Fortunata y Jacinta. Aunque siendo sincera me he quedado con ganas de saber algo más de esta última, especialmente en su segunda parte.

Fortunata y Jacinta tiene capítulos muy potentes y otros que lo son menos, pero todos ellos componen, en general, una obra muy equilibrada o así me lo ha parecido. Se me ha hecho corta a pesar de sus 1000 páginas y no he sabido cómo iba a acabar hasta el final cosa que siempre se agradece.

Mi única pena es no haberlo leído antes. No esperéis al momento adecuado, como yo, para hacerlo. Leedla. Viviréis durante una, dos, tres o cuatro semanas pegados a esa ciudad, a esos maravillosos personajes y sus historias.