A review by llevamoselfuego
Perdida by Óscar Palmer Yáñez, Gillian Flynn

5.0

“¿Que nos hemos hecho el uno al otro?”


Gone Girl nos lleva a lugares oscuros. La historia de la desaparición de Amy Elliot Dunne y la posterior investigación de su esposo Nick, convertida en una búsqueda para demostrar su inocencia está llena de giros y callejones sin salida donde la realidad comienza a volverse más extraña y siniestra de lo que cualquiera pudo haberse imaginado.


Con un formato contado en primera persona por Nick desde el “Día De” la desaparición, mechado con fragmentos del diarios de Amy, que datan de años atrás, Flynn juega con lo que conocemos de los personajes y en cómo se van cayendo las máscaras para revelarnos su verdadera identidad.


Es también, la historia de un matrimonio enfermo, repleto de engaños y miserias, cuyo pecado más grande es no poder soltarse, un amor enloquecido que se vuelve una cárcel, un pozo, un infierno.


A esta altura ya somos muchos los que vimos la adaptación de Fincher con Affleck y Rosamund Pike, pero como siempre, la voz de la autora se hace mucho más fuerte en el papel. Los lugares sórdidos de la humanidad son su patio de juegos y las idas y venidas de ambos personajes los metamorfosean todo el tiempo, y con el paso de la trama, comenzamos a desconfiar de todo y de todos.


Hay una tonalidad gris que abarca todo el libro, la idea de que nadie es completamente inocente y que la mirada de Flynn deja en claro todo el tiempo, tal vez la salvación venga de la mano de un abogado encargado de defender femicidas o que un personaje que en un momento creíamos un abusador termine convirtiéndose en héroe para caer en el foso de las víctimas a pocas páginas de distancia.


“Desde que tenemos internet y veinticuatro horas al día de televisión por cable, todo el mundo es un tribunal”


Es difícil hablar de Gone Girl sin revelar la trama, pero es interesante cómo, a pesar de que cada vez se nos vuelve menos “heróico” a nuestros ojos, buscamos que Nick salga entero de esta pesadilla en la que se está metiendo, aunque cada vez nos decepcione más y la realidad lo acorrale hasta dejarlo sin salida.


Hacía tiempo que no disfrutaba tanto un best-seller y aproveché el empujoncito de terminar Sharp Objects para meterme de nuevo en la cabeza de Flynn y encontrarme con un libro, que a pesar de conocer cada giro, me seguía sorprendiendo por la honestidad con la que está escrito, por la malicia que se esconde detrás de cada sonrisa, por la capacidad que tienen los medios de alterar la opinión pública y lo retorcidas que pueden ser nuestras relaciones.