La única razón por la que no puedo calificar cinco estrellas a este increíble libro es porque durante las dos semanas que me costó terminarlo deliberé sobre la opción de directamente dejarlo por la angustia que me causaba. Angustia de leer historias que han sido vividas y sufridas en verdad por más inimaginables que, quisiéramos, puedan parecer.
Es, sin lugar a dudas, un libro completamente necesario de leer por más desgarrador; es imposible seguir ocultando una realidad irracional y desaforada como la que pretende reescribir el movimiento sionista.
A pesar de la trepidación que supo generar esta lectura (y la actual situación en Palestina), me incitó a priorizar el estudio del caso que engloba Israel y sionismo, judaísmo, cristianismo, capitalismo, colonización, etc. Y si bien me quedo con un mal gusto en la boca al terminar el libro, no es por nada en absoluto culpa de Pappe, más bien, me da un poco de alivio y, a la vez, me hace sentir peor cuanto supo humanizar a los palestinos nativos, reconocer y honorar sus historias, aunque a eso le siguiera la tragedia.
Espero que muchísima más gente se digne a leer este libro de una buena vez y sepan reconocer la ilegitimidad ética de un Estado colonial tanto como fue y sigue siendo en las historias de todos los continentes y países invadidos, explotados y genocidados del mundo.
Sinceramente, esperaba algo más; fue un libro que me llamó la atención por la premisa que, para parafrasear, hablaba de ser un mensaje al océano del individualismo y la pobreza existencial de los tiempos. Para mí, Sábato siempre me ha sido un escritor formidable, su novela El Túnel no me gustó realmente pero no puedo negar su capacidad de transmitir sensaciones y reflexionar, además fue cabeza de la CONADEP y por eso siempre lo he tenido en mente como un autor del que leer más, pero este libro tampoco fue para mí.
La primera mitad del libro (de seis cartas que contiene) me pareció poco excepcional, muchas reflexiones comunes que suelen escucharse, textualmente, de cualquier hombre mayor de clase media; y hubo cosas que no me gustaron. La segunda mitad me pareció mejor; sin duda, la mejor de las cartas, es la que da nombre al libro. De cualquier forma, durante todo el libro percibí demasiada abstracción para las realidades tan concretamente desamparadas y desvalorizadas que hasta día de hoy y, sobre todo, la actualidad inmediata en la que termino este libro, se viven.
Me parece que es un libro con una base válida, honesta--humanista, obviamente, pero para un público que quizá recién comienza a introducirse, que ojalá si caen sobre este libro, después se vayan aventurando a más libros de similar temática. Mas, a mi parecer, hay mejores opciones; yo, no lo recomendaría como tal.
Una lectura que tomó casi un mes terminar (por pura procrastinación) porque en verdad es una lectura fácil, altamente accesible y, en su mayoría, bastante rápida. Por lo menos para mí, un libro que se compone mayormente de poesía y relatos no es de mayor interés y por eso creo que se me alargó tanto en el tiempo. Sin embargo, puedo decir que en un principio Ioshua me hizo querer enamorarme de un hombre (a mí, que he de ser la personificación del desinterés sexoafectivo y, sobre todo, desinterés en los hombres). Me impactó mucho la sencillez con la que pinta sus imágenes, figurativa y literalmente, pues sus dibujos, bocetos, cómics, también me gustaron un montón; y, con esto, me impactó mucho la sencillez con la que pintó sus imágenes del horror, del abuso y el eroticismo en las calles, de una vida que parece maldita, mas, prevalece, lucha y crece. Obviamente, la sección que más me gustó fue la del apartado de Clasismo Homo, no sólo por el hecho de ser noficción (que es a lo que más me aboco), sino porque con esa simple denominación, en simples párrafos, logró englobar conceptos y visiones políticas que a pesar de intersectar se buscan luchar separadas, y eso en Ioshua no va, a quienes les interpela, entienden, y esta denominación hoy más que nunca es sumamente importante. Además, no cabe duda que fue un verdadero disidente del orden hegemónico, no como muchos que se la dan de tal y no disienten en nada... Muchas lecturas mezcladas, pero muy interesantes.
I know these are only a few selections of the lengthier work that is Human, All Too Human, and that this is nineteenth century male aristocrat but man, it had started very interestingly only to go south halfway through. Whoever made the selection wanted to set him up or genuinely believes some of the absurdity this man spouted. For someone that spoke a lot about nobody really knowing the intentions, pain or experiences of others, he surely seems to know women's psyche, lmfao.
I know this isn't even a speck into Tolstoy's works but it put me off and bored me to no end... While I get the sentiments and ideas conveyed it just wasn't for me
2 stars because I only really liked the ending of What Men Live By, but How Much Land Does A Man Need? was a disappointment
I don't know what it is with these Little Black Classics editions but every one I've read has read so devoid of anything; I can't tell if it's the translations or the times these were written but I'm almost regretting buying the boxset
Creo que procrastiné bastante terminarlo porque aún no sé bien cómo poner lo que pienso sobre esta lectura en palabras.
Por un lado, hubo textos que me parecieron más relevantes que otros, autores que me parecieron menos propensos a enredarse que otros, pero en general fue un libro que me abrió mucho los ojos y me proveyó de información valiosa sobre un momento horrible de nuestra historia que a día de hoy se da por hecho u olvida o que, especialmente en estos tiempos, se niega o justifica. Como si volviéramos –o quisieran volver– a ser la misma sociedad de hace cuarenta, treinta años.
Sentí claramente cómo a lo largo del recorrido en mi cabeza iba acomodándose una nueva visión de la historia política y sus actores a través de una lectura que sirvió para rectificar perspectivas ingenuas que yo tenía.
Es obvio el trabajo de los autores, por la mera experiencia que la mayoría ya tenía en el tema. Si bien existieron cosas del momento histórico que no se analizaron en los textos (como la educación o la economía, que habrían llevado a una extensión imposible de cada artículo, obligándolos, prácticamente, a ser un libro en sí de cada uno), creo que fueron análisis bastante rigurosos con una continuidad eficiente a lo largo del libro.
No fue wow, revolucionario, pero estuvo lindo. Creo que dio mucha vuelta sobre lo mismo y lo que fue sobre el romance en sí me quedó muy cortito y superficial.
As I became a student of Deaf teachers while learning Argentinian Sign Language (LSA) and preparing to study interpretation, I, inevitably, started finding myself both fascinated and outraged by their culture and injustices respectively, found it necessary to engage more deeply in the way I find most comfortable, which is reaserching and reading—this book has been an incredible reasource, a witness' tale to what the Deaf community has been puting up and dealing with for ages. Despite being written in the 90s, it has tackled issues that my teachers still feel conflicted about today: issues like mainstreaming and professional neglect in dire situations were topics we talked about just last week in class.
This read was as eye-opening, as sometimes frustrating; inspirational and reflective, as though at certain points it felt defeatist introspectively—which I'd like to think wasn't the intention and I'm just percieving it that way.
It has made me wonder and compare how times have changed regarding Deaf activism, specially as a hearing person I can't help but question whether this movement has become stuck or I'm simply not hearing about it. In Argentina we've recently had a law pass for the recognition of sign language as a natural language and it makes me think, did it really have to take all this time? How much more time for the next step, the next right? This book has helped expand on my own introspection and perspective of hearing (the able-bodied) people and our neglectful, downright disrepectful actions towards other who don't conform the great majority of society. We ought to do better and I hope Deaf and Disabled people come forward to turn our world downside up with justice.
Es brillante todo lo que escribe esta autora. Tiene una forma distintiva y espectacular de mezclar la violencia, lo grotesco, la sexualidad, el género, la familia, la introspección, y todo con una gotita fantástica.
Es una escritura tan simple que, sin embargo, se sumerge en complejidades tan humanas. Para mí es como un respiro de aire fresco encontrarme con sus personajes, sus travestis tan variadas, tan erradas como cualquier persona, tan humanizadas; lejos de esa mirada sanitizada que parece que debería tenerse de personajes, de personas, que se espera que actúen de cierta forma para no escandalizar a quienes apenas nos toleran. Irónicamente, a lo largo de todo este relato la actriz y la autora, que son una, son conscientes de todo este dilema y se juega muy bien sobre esa idea; así lo analizo yo.
Mi libro favorito de ella siempre va a ser Las Malas—por lo menos hasta ahora. Aunque este me lo devoré enseguida y me dejó fascinado, hay algo en lo que el otro simplemente me gana.